Hay días en que tengo los ojos más claros.
Arde la brasa que era carbón
y el camino se abre en la
huella del fuego.
Vientos del este susurran en mis omóplatos,
dejar ir lo que pesa y ya no existe.
Hay días en que tengo los ojos más claros y puedo ser faro,
si quisieras
El silencio
es mediodía en la llanura
no hay sombra que
diga lo contrario.
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